Esa amiga en la que con tan solo pensar en ella, se te vienen millones de recuerdos a la cabeza. Han pasado momentos únicos, inolvidables e irrepetibles. Se han contado los mayores secretos y saben la vida de la otra como si fuera la suya. Se conocen a la perfección, saben sus virtudes y defectos, sus debilidades y fortalezas…esa amiga que siempre estará en lo más profundo de tu corazón y que ha marcado tu vida para siempre..¿Ya la tienes en mente? seguro todas tenemos alguna amiga así.
Este tipo de amistades son las que sentimos como verdaderas, esas amigas que no es necesario verlas siempre, incluso podrían pasar años sin verse y cuando se reencontraran, todo sería igual, la confianza estaría intacta y el cariño también. En cambio, hay amigas con las que seguramente lo hemos pasado increíble y hemos vivido también momentos únicos, pero que no necesariamente sentirás que es para toda la vida, si no que para una parte de tu vida. Una amiga de fiestas, aventuras y risas, pero que no pasa más allá de eso.
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¿Cuáles son las características específicas que nos hacen diferenciar al tipo de amistad verdadera y para siempre? Aquí te contamos lo que creemos al respecto.
5 características de una verdadera y gran amiga
1- Ella siempre estará en el momento justo: no importa si está de viaje o si no se ven hace mucho, sabes que puedes contar con ella como sea. Y no solo eso, cuando más necesitas de sus consejos o de su compañía, ella está ahí, ya sea al teléfono o en vivo y en directo, con el mensaje y la palabra precisa.
2- Se interesa en lo que te pasa: y viceversa. Esa amistad recíproca en que a ambas les importa que ha pasado y cómo va la vida de la otra. No eres sólo tú, tú y tus problemas o logros, también te importa lo que a ella le pase, te importa apoyarla, y saber de sus días, lo mismo ocurre de parte de ella hacia ti. Quizás no te lo pregunte todos los días, pero siempre habrá un espacio para preguntarte cómo has estado, si necesitas algo, para que conversen y se desahoguen. Su mundo no gira en torno a su ombligo, tu también eres parte de él.
3- Han pasado de todo juntas: risas, llantos, peleas, momentos difíciles y tristes, viajes, aventuras, vacaciones, paseos, fiestas, borracheras, noches de películas, penas de amor y MÁS. Esa amistad verdadera no se construyó en un día, se construyó en años y forma parte importante e imprescindible de tu historia como persona, esa amiga estuvo allí en miles de momentos de tu vida y eso nada podrá borrarlo.
4- Te conoce perfectamente: no puedes mentirle, ella sabe mucho más de ti que incluso lo que tu misma crees. Percibe tu tristeza, tu rabia, tu alegría o tus preocupaciones. Ella sabe lo que te molesta, sabe qué cosas puede decirte y cuáles te van a herir, sabe de tus gustos y yendo a lo más banal, sabe perfectamente cuál es tu tipo de hombre y cuál no.
5- Es feliz con tu felicidad: en esta amistad la envidia no existe, a menos que sea sana. Hay personas con las que uno huele a distancia cuánto les gustaría que algo fallara en tu plan, pues con una amiga verdadera eso jamás va a pasar. Ella es profundamente feliz cuando tu eres feliz, comparte tu alegría y si puede aportar en ser parte de ella, siempre lo va a hacer. Verte feliz es como un logro de ambas, porque ella sabe cuánto te ha costado llegar hasta donde estás.
Este post va dedicado a mis grandes amigas de la vida, esas que han estado conmigo desde que eramos unas miniaturas, hasta hoy y para siempre. Las adoro y les estoy eternamente agradecida por formar parte de mi historia y de mi vida. Ustedes saben quienes son.
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Por: Fernanda Urzúa M.
