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Con una exquisita combinación entre mar y selva, la Riviera Maya es uno de los paraísos que existen en México, extendiéndose frente a las hermosas e irresistibles costas del mar Caribe.

Y aunque Cancún y Playa del Carmen son algunos de los lugares más conocidos y visitados por los turistas, la Riviera Maya es mucho más que eso.

Dentro de sus 200 kilómetros se esconden playas solitarias, cavernas, cenotes, ríos subterráneos, vestigios arqueológicos y una intensa vida marina. Y como sabemos que todas amamos descubrir nuevos paraísos, en conjunto con nuestros amigos de expedia.mx les creamos una lista con 5 lugares secretos que están en Riviera Maya esperando a que los descubran:

Sian Ka’an

Conocer la reserva ecológica de San Ka’an es conocer el paraíso, de hecho, su nombre en maya significa “principio del cielo” y es una descripción casi literal. En esta biosfera se concentran casi todos los ecosistemas marinos, costeros y terrestres de la Península de Yucatán y si te animas a hacer el tour podrás navegar sus ríos y manglares en kayak o lancha, nadar dejándote llevar por la suave corriente de sus canales y, si tienes suerte, ver un manatí o un cocodrilo paseando a sus anchas.

El paseo en lancha atraviesa varias lagunas y navega entre los canales que los antiguos mayas solían utilizar para el comercio, permitiéndote entender este cruce entre agua dulce y salada que termina en una playa que te deja sin aliento.

Puedes contratar tu tour en Tulum o directamente en la Cooperativa de Servicios Ecoturísticos de Chuyaxché / Muyil.

Cobá

A 46 kilómetros de Tulum se encuentra Cobá, uno de los principales centros ceremoniales mayas de la antigüedad. Su nombre en maya significa “agua turbia” y es un complejo de impresionantes construcciones del periodo clásico maya, con una estratégica red de caminos que solía distribuir bienes y servicios entre la costa y la parte norte de la península.

La pirámide de Nohoch Mul, de 42 metros de altura, es la más alta de toda la península de Yucatán (sí, más que la de Chichen Itzá) y, si tus pulmones te lo permiten, puedes subirla completa.

Cobá te recibe con una espectacular laguna en la que puedes llegar a ver alguno que otro cocodrilo, y una vez dentro de la zona arqueológica puedes hacer un paseo en bicicleta a través de la selva. El recorrido es tan místico que lo mejor que puede pasarte será que te toque una refrescante lluvia que conectará aún más con la naturaleza.

Sistema de cenotes Ponderosa

Uno de los grandes atractivos de la Riviera Maya son sus cenotes, “albercas” naturales que se abren paso entre los ríos subterráneos que caracterizan a la región. Nadar en ellos es toda una aventura y cada uno tiene algo que lo hace único e inolvidable.

A 20 km de Playa del Carmen está el sistema de cenotes Ponderosa en el que se encuentran algunos de los más bonitos de la península. Nuestros favoritos son el Azul, rodeado de espesa vegetación en el que puedes esnorquelear entre peces gato; el Cristalino, con aguas que le hacen honor al nombre y una cueva en la que te puedes sentir Indiana Jones; y el Ponderosa, que le da nombre al sistema y tiene al fondo unas enormes rocas cubiertas de algas que lo vuelven súper atractivo para el buceo (tiene 14 metros de profundidad, ¡imagínense!).

Además está el Kantun-Chi Ecopark, un parque ecológico que tiene 4 cenotes dentro de tipo caverna en los que puedes nadar tranquilamente. 2 de ellos están conectados por pasillos decorados con estalactitas y estalagmitas que te hacen sentir pequeña y maravillosa a la vez.

Aktun Chen

Este parque natural abarca 150 hectáreas de la más bella y verde selva y ofrece una verdadera experiencia para los amantes del ecoturismo. Aquí encuentras tirolesas y puentes colgantes que te permiten apreciar la diversidad del paisaje desde las alturas, o tours de esnorquel dentro de un cenote para maravillarte con los colores de los peces que ahí viven.

El atractivo principal de Aktun Chen es una extensa caverna seca de 600 metros de longitud con una increíble bóveda repleta de estalactitas, estalagmitas y columnas de piedra. Al final de la cueva te espera uno de los cenotes más bonitos que verás en tu vida, completamente iluminado para que puedas apreciar sus colores y los de sus habitantes.

Este parque tiene un pequeño zoológico de fauna silvestre con el que buscan la reproducción de más de 15 especies, algunas de las cuales se encuentran en peligro de extinción. Algunas de las especies que podrás observar en tu recorrido son el venado cola blanca, el mono araña, el coatí, el pecarí y el sereque, además de muchísimas especies de serpientes (que no se te acercan) y pajaritos que te alegran cada paso que das entre la selva.

Akumal

Si lo tuyo son las tortugas o te mueres por bucear entre los famosos corales del Caribe, el mejor lugar para hacerlo es Akumal, un lugar en el que no hay muchos turistas ni demasiados hoteles, permitiéndote experimentar la Riviera Maya en su máximo esplendor.

Este destino fue una plantación de cocoteros y ahora es un gran referente para la práctica de esnorquel y buceo, además de ser el punto de llegada de las tortugas marinas entre abril y octubre, que es cuando regresan a la playa en la que nacieron para desovar, hecho que le da su nombre en maya: “lugar de tortugas”.

Aquí te esperan también cuevas subterráneas de más de 150 metros de profundidad; la caleta Yalkú en la que encontrarás un ojo de agua dulce en medio de una zona rocosa; y el arrecife de coral, conocido como la Joya del Caribe, habitado por una extensísima variedad de fauna marina, lo que lo hace uno de los jardines coralinos más hermosos del mundo.

La Riviera Maya tiene algo para cada una de nosotras, un punto de encuentro con la naturaleza, el mar y el cielo. Además, la oferta hotelera de la zona es muy variada, yendo desde hoteles ecológicos en los que no hay luz eléctrica, hasta hoteles de Gran Turismo, permitiéndote disfrutar de este paraíso como tú prefieras.

¿Ya tienen las maletas listas?