La Incontinencia urinaria es una de las disfunciones del piso pélvico más comunes en hombres y mujeres, la cual afecta directamente la calidad de vida de quienes la padecen, causando inseguridad y disminuyendo la vida social por temor a presentar un episodio vergonzoso.
Por esta razón, presentaré 7 consejos para prevenir la aparición de esta molesta disfunción.
- Así como movemos todos los músculos de nuestro cuerpo diariamente durante nuestras actividades de la vida diaria, es importante realizar contracciones voluntarias de la musculatura del piso pélvico para evitar que se debilite y pierda las cualidades físicas que le permiten cumplir con su función de soporte y sostén de los órganos intrapélvicos como la vejiga urinaria, el recto y el útero en las mujeres. Los ejercicios de contracción se pueden realizar durante las actividades de la vida diaria como por ejemplo la caminata o el subir y bajar escaleras. Igualmente es importante involucrarla activación muscular en momentos de aumento de presión abdominal como durante la risa, la tos, los estornudos o los esfuerzos.
- Visitar el baño para orinar cada 3-4 horas es una excelente medida para prevenir que la vejiga se distienda excesivamente y pierda su capacidad de contracción para evacuar completamente la orina. Por otra parte, el ir muy seguido al baño puede ocasionar que la vejiga pierda su capacidad de almacenamiento y podría desencadenar urgencia miccional acompañada de incontinencia, siendo imposible aguantar las ganas de orinar antes de llegar al baño y por lo tanto presentar escapes de orina.
- La ingesta exagerada de algunos alimentos puede producir irritación vesical, haciendo que la vejiga se contraiga hiperactivamente y por lo tanto la frecuencia miccional aumente de forma anormal. Por lo tanto, se recomienda ingerir con prudencia alimentos como los cítricos y sus zumos, el tomate, los endulcolorantes artificiales, y las bebidas gaseosas. Igualmente, las bebidas con cafeína como el café, té, bebidas de cola y el chocolate pueden producir aumento de la frecuencia urinaria.
- La tos crónica y el aumento de presión intraabdominal que ésta produce, genera debilidad a nivel del piso pélvico, el cual debe soportar y contrarrestar esta presión para evitar el prolapso de los órganos y el escape de orina, fecas o gases. Por esta razón es importante evitar hábitos como el tabaquismo, el cual trae como consecuencia la tos repetitiva y crónica.
- El ejercicio físico debe hacer parte de la vida diaria, sin embargo, los esfuerzos físicos excesivos, sin un entrenamiento constante de fortalecimiento del piso pélvico, puede producir debilidad en esta zona, produciendo incontinencia urinaria de esfuerzo. Se recomienda, por lo tanto, realizar los abdominales tradicionales junto con una óptima contracción el piso pélvico o bien sustituirlos por abdominales hipopresivos que previenen la distención excesiva en esta zona y promueven su contracción.
- El embarazo y parto generan una serie de traumatismos sobre la musculatura perineal ya que ésta debe soportar mayor preso durante los 9 meses de desarrollo fetal. En el trabajo de parto y el alumbramiento el piso pélvico se ve sometido a repetidos aumentos de presión causados por el pujo, lo cual hace que sus fibras se distiendan abruptamente una y otra vez. Y finalmente, la episiotomía genera una lesión en las fibras musculares.
Para evitar consecuencias como la Incontinencia Urinaria post parto, se recomienda realizar un entrenamiento muscular durante el embarazo para mantener la zona en óptimas condiciones y de esta forma minimizar los daños.
Carolina Silva G
Kinesióloga especialista en disfunciones del piso pélvico
Centro Miintimidad
Foto de: Foto de: cuidatusaludcondiane.com
