¿Qué mejor que cuidar el cabello con productos naturales y a la vez preocuparnos del medio ambiente? Lo mejor de todo es que hoy sí es posible, ya que Familand elaboró un shampoo y un bálsamo con extractos naturales de arándano que además es un producto ecofriendly.
Propiedades del arándano para el cabello
El arándano es un súper fruto que aporta increíbles beneficios a practicamente todo nuestro organismo y en este caso, especialmente al cabello.
El arándano es una fuente natural de polifenoles, vitaminas y minerales con propiedades fortificantes, antioxidantes, nutritivas y reguladoras de la secreción sebácea. Protege integralmente el cebello normal o graso de las agresiones del medio ambiente.
Mi experiencia usando Familand Arándano Bio
Utilicé Familand Arándano Bio primero porque amo lo arándanos y en general todos lo productos de cuidado capilar que provienen de la naturaleza y que ojalá estén lo más libres de químicos posible. Además me encantó que fuera ecofriendly porque sobre todo en estos tiempos, no podemos estar al margen de la situación que vive nuestro planeta y de verdad que cada granito de arena, suma.
Me pareció que tanto el shampoo como el bálsamo son portadores de un aroma muy rico y sutil, lo que me encantó porque personalmente no me gustan mucho los aromas tan sobrecargardos, mi pelo quedó suave y lo mejor, es que está libre de sal, la cual no aporta nada a nuestro cabello y de hecho tiene efectos muchas veces negativos sobre todo en cabellos que llevan tratamientos encima.
Cuidado del medio ambiente
Qué importante resulta asumir reponsabilidades con nuestro planeta al momento de elaborar un producto. Eso me encantó de familand, porque su línea BIO tiene varias ventajas en ese sentido. Lo que amé, fue que no es testeado en animales, eso habla de una importante conciencia con el entorno.
Además, sus envases son reciclables y el producto en su totalidad es biodegradable, lo que significa que puede descomponerse en elementos químicos naturales sólo por la acción de los agentes biológicos como el agua, el sol, las plantas y la bacterias.
Por: Fernanda Urzúa M.
