Siempre te dije que me gustaba la verdad por muy dura que fuera, que simplemente prefería una verdad dura que una mentira bonita, que finalmente me matara. Te lo dije varias veces, pero tú solo decías que yo era insegura y que no tenías a otra, pero la verdad jamás terminé comiéndome tus mentiras por muy lindas que las pintaras.
Solo me imaginé lo bonito que hubiera sido y hoy veo lo tonta fui, pues solo vi a un chico lindo que se fijó en mí, pero la verdad es que solo me querías para hacerte más hombre o ¿qué? Jamás pensaste en mí y en lo que yo podría sentir cuando era la otra.
¿Sabes? me enseñaste varias cosas. Como por ejemplo, que quien te quiere te busca y no se rinde jamás, o que si a alguien le gustas se nota y si no, se nota aún mas, mucho más. Simplemente no fuiste un hombre sino un bufón que enamora e ilusiona a una mujer. Solo fue un juego de niños que al final con solo bloquear y eliminar conversaciones todo se fue sin dejar rastro ni gotas de sentimientos.
Quiero que sepas que yo no soy un trapo al cual puedes usar y tirar, soy una persona la cual tenía sentimientos por ti simplemente porque me mostraste tu cara bonita y tus frases ensañadas en el espejo, esperando que yo solo cayera a tus pies para hacer lo que quisieras conmigo.
Hay un límite para todo y yo toqué fondo contigo, porque simplemente me di cuenta que tu, por mucho que yo quisiera, no valdrías la pena, aunque trataras de resolver las cosas con regalos o detalles bonitos y teniendo la tonta ilusión de que algún día te podrías enamorar de mí, soñando despierta eso era lo único que hacía, inventando un mundo de fantasías donde lo único que aparecía eras tú, yo y nuestro castillo de felicidad. Gracias a Dios desperté de esa pesadilla.
Andy V.
