A veces podemos pensar que el cine de arte es aburrido, y la verdad es que hay algunas películas que sí nos pueden hacer echarnos una siestecita si no estamos acostumbrados, pero ya en serio, ver cine de arte no es ver la historia de un señor de edad avanzada descalzo dando vueltas a un cactus mientras una voz en off lee un poema, todo en blanco y negro por supuesto.
Entonces ¿vale la pena ir a la Cineteca? ¡Claro!
Para empezar es más barato. Martes y miércoles hay precio de estudiante para todos, el resto de la semana obtienes precio especial con credencial de estudiante, maestro o adulto mayor, si no tienes ninguna sigue siendo más económico que otros cines.
¡La comida! La oferta culinaria es más extensa que en el cine tradicional, hasta hay Helados Roxy adentro.
El espacio. Tras la remodelación quedó súper padre y la verdad es que aunque no entres a ver una película puedes disfrutar mucho simplemente ir con una amiga a tomar un café y platicar un rato.
Foro al aire libre. Puedes ir a ver una película de una manera diferente en este espacio especialmente adecuado para la proyección al aire libre.
Lo mejor para el final, las películas: Constantemente hay estrenos nacionales e internacionales, puedes ver el trabajo de los directores y actores más aclamados, futuros nominados al Óscar y películas premiadas en los festivales más importantes del cine mundial. ¡Atrévete a cambiarle! Te podrás encontrar con tu nueva película favorita sin siquiera esperarlo.
Una recomendación importante para disfrutarlo es que leas las sinopsis y reseñas de las películas, no te dejes llevar por el nombre porque puedes encontrarte con algo que no esperabas. Elige lo que te llame la atención, revisa el género, país, duración y dale una oportunidad al cine.
Revisa la cartelera de vez en cuando, varias películas del cine comercial las puedes encontrar aquí.
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