You are currently viewing ¡¡Levántate desde el corazón Norte querido!! Una columna para las Nortinas… @franjarab

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Norte de Chile.- Desde que era muy pequeña, teníamos que hacer por lo menos una vez al año un simulacro de operación Deyse. Mi colegio quedaba en una calle de Iquique justo frente al mar. La brisa marina en verano refrescaba los mediodías de clases y en invierno, nos entumía incluso usando cortavientos. Nos decían que algún día el mar se podía salir y teníamos que saber hacia dónde arrancar. Yo tenía 6 años.

Asi pasó toda mi enseñanza básica, recordando siempre que el mar, algún día se podía salir; sonaba a fantasía. 

Varios años después, mi colegio se cambió de ubicación y se fue a las faldas del Cerro Dragón, donde al fin pudimos olvidarnos del mítico tsunami.

La gente en Iquique lo tiene grabado en la piel. No hay ningún iquiqueño que no sepa la historia: que van ciento y tantos años sin terremoto, que se viene, se viene uno grande…..

Nunca pensé que ocurriría realmente, parecía el cuento de Pedrito y el Lobo. Lo peor, es que lo sigue pareciendo, porque el Norte Grande sigue sitiado, cuarenta y ocho horas después, esperando lo innombrable, lo que nadie quiere ni pensar.

Es muy difícil estar lejos de mi familia, dependiendo de una señal de teléfono para saber si están bien después de cada réplica. Pero estar siendo protagonista obligado de esta catástrofe natural, sin tregua, sin casa, sin agua, debe ser terrible. Sobre todo, después de haber acumulado años y años de reacción angustiosa con la famosa amenaza. 

Le quiero decir a mi familia, a mis amigos y a todos quienes están en este momento agotados, que llevan dos noches sin dormir, sin poder descansar, que estamos todos juntos en esto, los que estamos en el resto del país con ustedes desde el corazón, mente, alma, guata; que podemos sostenernos mutuamente  con la confianza de que habrá valido la pena tantos años de ensayo, para que en esta ocasión podamos contar todos juntos, que sí sirvió la dedicación, todos esos simulacros, los cabezazos metiéndose bajo el escritorio y la certeza de que, llegado el momento, sabríamos cómo batir esta adversidad mostrando que la fama de campeones, de aguerridos, es absolutamente merecida. 

Mi Norte se ha lucido en actitud cívica y cooperación, pero su coraje, su carácter y resiliencia, son incomparables. 

Levántate desde el corazón querido Norte que la huella está en tu piel, y asimismo la fortaleza para enfrentarlo ganándole, una vez más, a la historia.

 

Firma: una iquiqueña.

fran jaraFrancisca Jara B.

Abogado y tarotista transpersonal