You are currently viewing Memoria celular: una propuesta para transformar nuestra vida

Queremos compartir con ustedes información que nos hizo llegar Eduardo Huerta. En Mujer y Punto aún no conocemos bien este método y por lo tanto no podemos recomendarlo pero sí queremos darlo a conocer para quien se sienta interesada pueda tener más información.

“¿Tienes un problema recurrente que no tiene causa aparente? ¿Por qué en nuestra vida algunas cosas siempre nos salen mal y otras las obtenemos con tanta facilidad? La explicación podría estar en tu memoria celular, donde se procesa la información con la que tomamos las decisiones y donde están registradas ¡hasta las malas experiencias de tu abuela!

¿Qué es la memoria celular?

Gracias a la masificación de los trasplantes, hoy sabemos que las células guardan nuestros recuerdos, gustos, temores y habilidades. De hecho, durante las dos últimas décadas, diversos estudios científicos han descrito los efectos producidos entre personas receptoras de un órgano trasplantado.

La  evidencia indica que los cambios en la personalidad se deben a que junto al órgano, el receptor recibe un registro de vida del donante almacenado en las células del cuerpo y que conocemos con el nombre de  memoria celular. Este cambio incluso puede modificar la biología al punto de cambiar el grupo sanguíneo.

Un manual de instrucciones que nos ayuda a sobrevivir

La “memoria celular” tiene por objeto hacer que nuestro organismo funcione en perfecto orden y también registrar y activar mecanismos inconscientes de defensa cada vez que nos veamos expuestos a todo aquello que nos dañó o que puede poner en peligro nuestra sobrevivencia.

Son verdaderos manuales de comportamiento que reaccionan frente a un estímulo. Este manual le dice a cada célula como actuar. Es crucial para nuestra vida. Así sabe el óvulo cómo unirse con el espermatozoide, cómo multiplicarse y después estas células madres (que son todas iguales) saben cómo realizar trabajos especializados dependiendo si deben formar un ojo, la piel o de nuestros huesos.

Una vivencia crea una experiencia

Por ejemplo, cuando el virus del sarampión infecta a un niño, se produce la activación de su sistema inmunológico para que produzca anticuerpos proteicos que lo protejan contra ese virus.

En el proceso, la célula deberá crear un nuevo gen que sirva como molde a la hora de fabricar anticuerpos contra el sarampión. Esa experiencia crea un concepto sarampión = peligro vital.

Posteriormente retienen una «memoria» genética de este anticuerpo, y etiquetan al sarampión como peligroso. Si en el futuro el individuo se ve expuesto a este virus, inician de inmediato una respuesta inmunológica protectora.

El nuevo gen del anticuerpo se transmite también a la descendencia de las células cuando éstas se dividen.

Esta increíble hazaña de ingeniería genética tiene una importancia crucial, ya que representa una inteligencia y comunicación extraordinaria entres nuestras células. 

Una gran red de internet celular

Las células están permanentemente interconectadas, captando y compartiendo información como una gran red de internet. Cuando una célula tiene una primicia, la comparte rápidamente con las demás. Esta nueva información anula y reemplaza la información anterior. Vivimos el presente, con información actualizada segundo a segundo.

Por lo tanto, nuestro manual es dinámico y puede ser modificado. Dicho de otra forma, controlando nuestras percepciones podemos encender y apagar los genes. Un mismo gen puede expresarse hasta de 30.000 maneras distintas.

El miedo a las arañas y las relaciones de pareja

Nuestros conceptos están almacenados en lo más profundo del inconsciente. Generan respuestas inmediatas, que no controlamos y que a nivel consciente no podemos contradecir. Por eso cuando un deseo consciente se opone a una programación inconsciente no logramos obtenerlo por más que nos esforcemos.

Piensa en una persona que tiene miedo a las arañas y de pronto ve una caminando por su brazo. ¿Qué le ocurrirá?

Tú le puedes decir que es tu mascota, que no hace nada, que es muy tierna, pero ella estará en un estado de estrés máximo. Tus razones consientes no tienen poder sobre su programación inconsciente.

Para modificar esta conducta de evitación y defensa frente a las arañas, debemos ir hasta su “manual de instrucciones” encontrar la página (vivencia) que provoca ese miedo y reemplazar esa etiqueta brumosa por otra que señale: araña = inofensiva.

Si en tu inconsciente tienes malos conceptos respecto de los hombres (inculcados en la infancia con frases como “hay que cuidarse de los hombres”, o viste sufrir a tu mamá “los hombres son malos, hacen sufrir”, etc.) existe una alta probabilidad que tengas problemas e inseguridades en tus relaciones de pareja, porque cada vez que un hombre se acerque demasiado en tu vida, desencadenarán en ti programas inconscientes de defensa confundiéndolo con un peligro.

¿Cómo lograr el cambio?

Para positivar esa “bruma” celular tenemos muchas opciones. Una de ellas es editando nuestros genes. Esto ya se está haciendo con éxito en el tratamiento de muchas enfermedades y se están construyendo los primeros medicamentos epigenéticos.

Pero para casos más simples como nuestra suerte en el amor, las habilidades matemáticas, o el éxito profesional, podemos encender y apagar nuestros genes mediante la incorporación de nuevos conceptos en el manual de instrucciones.

Esto se logra comunicándonos con nuestro inconsciente y bombardeándolo de nueva información que actualice y reemplace la anterior.

En más de 5000 horas de coaching, hemos comprobado que la forma más rápida y eficiente de lograr buenos resultados es:

  • Mediante la propia voz de la persona, porque las palabras y ciertas frecuencias tienen el poder de modificar el ADN (7)
  • Mediante mensajes subliminales como los que usa la publicidad.

Esos mensajes provocan una inconsistencia en nuestras etiquetas puesto que no podemos vivir con dos realidades: o le temes a los temblores o no le temes.

Cuando eres una persona que sufre con los temblores y le estás diciendo a tu inconsciente que eres una persona que permanece calmada, entonces tu organismo no resistirá vivir con esos dos mensaje contradictorios, y “mostrará sus cartas” trayendo a la superficie la situación que generó el miedo. Es una especie de justificación de nuestro organismo como si nos dijera: “mira le temo a los temblores porque…”

Cuando esta situación-raíz es descubierta, puede ser analizada y resuelta. Por lo tanto, programar tu memoria celular no es una terapia, es simplemente una técnica que maneja deliberadamente tus percepciones para lograr un cambio en tus conceptos.

Como hemos dicho, las vivencias dejan marcas en nuestros genes, como por ejemplo cuando nos muerde un perro. Podemos generar marcas de la misma forma creando vivencias y percepciones positivas.

Si quieres seguir leyendo acerca de la memoria celular y nuestro poderoso inconsciente, pincha aquí.

Por: Eduardo Huerta.