Ya saben ustedes que me gusta escaparme fuera los fines de semana con mi marido. Antes me encantaba pasar meses y meses viajando en lugares lejanos pero hoy prefiero las estadías más cortas y no tan lejos. Por eso se nos ocurrió ir a las Termas de Jahuel. Hace tiempo que estaba tentada de ir a unas temas. En abril de este año estuve en unas en Malasia y no me gustaron para nada y hace unos años fui las Termas de Puyehue que me fascinaron, así que ahora quería conocer estas que están tan cerca de Santiago, donde yo vivo.
Fue un fin de semana rico porque pude descansar harto, conversar con mi marido, comer rico y pasear. El entorno del hotel es precioso, caminar por las montañas es una gran experiencia que relaja y desconecta. La infraestructura en general es buena. La pieza era muy cómoda y con un lindo balcón, pero lamentablemente me costó dormir ya que escuchaba el ronquido de la pieza de al lado. Un punto en contra ya que si me voy a unas termas es justamente para descansar y dormir bien pero creo que las murallas son muy delgadas….finalmente me quedé dormida pero no sin antes haber estado a punto de ir a despertar al vecino.
La atención es muy buena, el personal realmente es muy amable y eso hace que sea muy grato estar ahí. Nosotros teníamos pensión completa incluida y la comida era rica pero no exquisita. Lo que si es delicioso son los postres!!!! ñam ñam!! muy ricos.
Tienen hartas actividades para hacer además de bañarse en las termas. Mi marido fue a andar a caballo, el día que llegamos nos hicimos masajes, hay canchas para hacer deporte, actividades para niños, peluquería, etc y a las 5 de la tarde regalan a los huéspedes unos churros muy ricos.
Sobre las termas mismas lamentablemente no puedo contar algo muy bueno. Estaban tan tan tan repleta de gente que no había dónde estar. Yo que quería descansar en una reposera y no habían…lo que me parece pésimo porque la estadía no es barata. La opción era estar dentro del agua (con el calor que eso implica) o estar fuera pero parada sin poder descansar. Me parece que en un hotel de esta categoría esto no puede suceder, pensando además que justamente uno va a eso. De hecho el domingo mi marido prefirió ni ir a las termas porque no quería estar de pie esperando cuando la idea era descansar. Quizás han ampliado el número de habitaciones pero no las termas entonces les quedaron chica.
Les hago un punteo con lo bueno y lo malo.
Lo bueno:
1.- Entorno lindo.
2.- Infraestructura buena.
3.- Piezas amplias y cómodas.
4.- Postres exquisitos.
5.- Ricos masajes.
6.- Buena atención por parte del personal.
7.- Me encantó que dieran churros a las 5 de la tarde.
Lo malo:
1.- Fuimos para descansar en las termas y era casi imposible estar ahí porque no había dónde estar.
2.- En la ducha del baño salía agua fría y agua caliente, agua fría y agua caliente….me quemaba, me daba frío. No estaba bien regulada.
3.- Las murallas son muy delgadas y se escucha si te toca alguien que ronca en la pieza de al lado. (lleva tapones por si acaso)
4.- Las fundas de las reposeras estaban sucias.
¿Volvería a ir? Feliz si me lo regalan o por una ocasión especial familiar como ir a celebrar el aniversario de matrimonio de mis papás con mis sobrinos y hermanos, etc. Pero no volvería a ir con mi marido como escapada para descansar los dos solos ya que el gasto es de casi mil dólares por pareja y creo que hay opciones mejores. ¿Me arrepiento de haber ido? No, fue de todos modos un fin de semana rico y es bueno conocer lugares nuevos.
Caro Guida.
Las fotos de la infraestructura son de enviajes.cl
Las otras dos fotos son mías.