No cualquier persona puede tener un perrito, eso está claro. Elegir tener una mascota puede ser muy entretenido, sobre todo por lo tiernos que son cuando cachorros, pero implica varias responsabilidades y asuntos a tener en consideración, como su espíritu juguetón, sus excesivas demostraciones de cariño, sus ladridos y el tiempo que debemos dedicarles para jugar. Una vez asumiendo eso, el cariño que podemos llegar a tener por una mascota es infinito e incondicional, incluso más que el que podemos sentir por otro ser humano.

Todo esto es lo que hacía enfurecer a la novia de Getzen, un chico de Carolina del Norte, Estados Unidos, que vivía con su perrita Molly, una beagle con la que son inseparables. El problema fue que su novia ya estaba molesta con el animal y no le agradaba mucho su presencia ni la atención que le quitaba. Con el paso del tiempo ella colapsó y le pidió a su novio que porfavor se deshiciera de Molly. Fue entonces cuando Getzen publicó un aviso en internet para conseguirle un nuevo dueño. No podrás creer lo que dice:

“A mi novia no le gusta mi beagle Molly. Entonces tengo que buscarle un nuevo hogar. Es de raza pura, viene de un área con dinero y la he tenido por 4 años. Le gusta jugar. No está muy bien entrenada. Tiene el cabello largo y es un poco costosa de mantener, especialmente las uñas, ya que le encanta su manicura. Se pasa toda la noche ladrando, pero duerme cuando estoy en el trabajo. Sólo come la mejor y más refinada comida. NUNCA te saludará en la puerta después de un largo día, ni te dará amor incondicional cuando te sientas mal. No muerde, pero puede ser infernalmente mala.

Entonces… ¿Algún interesado en mi novia de 30 años de edad, egoísta, malvada e interesada en el dinero? Vengan y llévensela. Mi perrita y yo queremos que sea re-adoptada inmediatamente”.

Simplemente GENIAL, ¿qué les parece a ustedes la respuesta de Getzen a la petición de su novia?

Por: Fernanda Urzúa M.

Foto de: Barkpost.com