You are currently viewing ¿Por qué cruzamos las piernas para evitar orinar?

Les debe haber pasado en alguna oportunidad, que están con ganas de orinar y no encuentran un baño cerca o están ocupadas, distraídas y postergan la ida al baño.

Seguro que después de un rato les vienen unas ganas imperiosas de orinar, pero a veces ya es tarde.

Intentamos aguantarnos hasta llegar a un baño y realizamos toda clase de trucos para evitar el escape de orina.

Algunas mujeres respiran profundo; otras se sientan, ponen presión en el periné, realizando una presión con la mano; algunas se agachan y presionan con el talón el área perineal y muchas cruzamos las piernas, tratando que desaparezca ese deseo inminente de orinar.

En ese momento la vejiga, cuya función es el almacenamiento de orina, alcanza su capacidad máxima, la cual varía con la edad.

En promedio, ésta es capaz de almacenar unos 500 cc de orina.

La vejiga es como un globo con un cuello más angosto llamado uretra, tiene tejido elástico y es capaz de distenderse y contraerse.

Está rodeado en su pared externa por un músculo llamado Detrusor, el cual se contrae cuando la vejiga va alcanzando su capacidad máxima, con el objeto de evitar la sobre distención y de esta forma alertar que ésta debe vaciarse iniciando la micción.

En el cuello de la vejiga existe una llave de paso, que es el esfínter uretral externo, compuesto por músculos voluntarios, que están encargados de relajarse durante la micción para permitir el vaciamiento vesical y de contraerse para evitar el escape de orina.

Muchas mujeres no saben como localizar o ubicar esta musculatura y para evitar orinarse cuando tienen urgencia miccional, cruzan las piernas y tratan de contraer los músculos aductores para evitar la incontinencia de orina.

Lamentablemente, estos músculos no tienen incidencia ni ejercen ninguna acción sobre el cierre de la uretra o el esfínter externo de la uretra, por lo cual seguramente caerán esas bochornosas gotitas de orina.

¿Qué debes hacer para evitar este desagradable momento? 

  • Orinar si o si cada 3 horas.
  • No aguantar si tienes ganas de orinar

Si aparece un deseo inminente de orinar debes:

  • Detenerte
  • Respirar profundo
  • Contraer la musculatura perineal, como si fueras a detener el chorro de orina durante 10 segundos.
  • Repetirlo cuantas veces sea necesario.
  • Una vez que desaparezca el deseo inminente de orinar, caminar hacia el baño y vaciar la vejiga, relajando la musculatura del esfínter uretral, para permitir el vaciamiento completo de esta.
  • Aprende a localizar esta musculatura introduciéndote el dedo medio en la vagina y trata de contraer y relajar tus músculos vaginales, sintiendo la presión sobre tu dedo.
  • Agarra un espejo, mira tus genitales y observa como se cierra y abre la vagina.
  • Si estos cuadros de urgencia miccional, son muy frecuentes, debes consultar con un profesional especializado en el tema.
  • Existe un tratamiento farmacológico y ejercicios kinésicos específicos para solucionar este problema.