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Me encuentro nuevamente en San Francisco, trabajando en mi anhelado Doctorado. Hace unos minutos estaba conversando con una de las profesoras y le comente que tenía que escribir esta columna… ella me sugirió que escribiera sobre los errores que los hombres cometemos y repetimos en la cama…y nos quedamos comentando… la “profe” es Patti Britton, PhD, MPH,  clinical sexologist, past president of the American Association for Sexuality Educators, Counselors, and Therapists (AASECT), and associate professor of sexology with the Institute for the Advanced Study of Human Sexuality.

1. Creer que sabe satisfacer a “las” mujeres: dejo el “las” entre comillas para resaltar la sobre-generalización que hay por debajo. No estamos hablando de cómo hacer que el perro salive o que el ratoncito apriete la palanquita. No necesariamente porque a tus dos parejas anteriores les haya gustado que les succionaras el lóbulo de la oreja, les va a gustar a las siguientes…Cada pareja sexual es una intersubjetividad a explorar… no niego la importancia de conocer el cuerpo y como estimularlo, pero si se repite monotemáticamente lo mismo con las distintas parejas, como si fueran maquinas de flipper…no le veo muy buen destino (placer).
En palabras de Shunryu Suzuki: en la mente del principiante hay posibilidades infinitas y en la del experto muy pocas.

2. No considerar el contexto: relación sexual con tu pareja un día jueves, a las 12 de la noche, después de comerte dos empanadas de pino, cuando han estado discutiendo todos los días previos, ella te ha dicho lo cansada que esta y que se siente fea y sin ganas de nada V/S han tenido un muy buen fin de semana juntos, han compartido y conversado mucho; el domingo en la mañana se despiertan descansados y con mucha energía…
Sr. Hombre: ¡¡¡NO DA LO MISMO!!!

3. La rigidez: algunas veces he escuchado a mujeres que dicen: “dos cucharadas y a la papa” (chilenismo para decir que algo se hace rápido y sin preparación). Otras veces puede demorarse más, pero siempre es lo mismo…”me toca una pechuga, un par de besos, después me toca un rato y me penetra…”aquí los dos son responsables (si extendemos esto todo lo que pase en una RELACION sexual implica lo que hace, siente y piensa cada uno de los bailarines…). La rigidez es muchas veces lo que está en la base (o manteniendo) las disfunciones o dificultades sexuales. Generalmente cuando repetimos…lo hacemos en piloto automático, sin estar plenamente conscientes…y así nos perdemos de mucho.

4. Yo soy todo lo que ella necesita: ¿Eres? o te angustia no serlo y te defiendes pensando así? (se me salió el psicoanalista “reprimido”). Y puede ser que seas lo que ella necesita, en la mayoría de los aspectos; en caso contrario la ecuación costo-beneficio la habría hecho no estar contigo…pero puede que en el plano sexual necesite otras formas de estimulación: películas, lubricante externo, juguetes sexuales…y no te pongas a comparar el tamaño del vibrador con el tamaño de tu pene; recuerda el punto número 2 amigo mío.

Mujeres: ¿Podrían compartir sus opiniones?

 

 

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Psicólogo Rodrigo Jarpa, Terapeuta Sexual