You are currently viewing 5 maneras en que puedes lesionar tu vagina
  • Post category:Sexualidad

Ya sean infecciones por hongos, ETS y/o pelos encarnados, nuestras partes femeninas no son ajenas a los problemas no deseados e incómodos. Y tampoco son inmunes a las lesiones: estamos hablando de golpes, hematomas y rasguños. Aquí hay cinco formas en que puedes lastimarte ahí abajo y qué hacer si te encuentras en una de estas situaciones.

Hematomas

“Un hematoma es solo un hematoma”, dice Fahimeh Sasan, Profesor asistente de obstetricia, ginecología y ciencias de la reproducción en la Escuela de Medicina Icahn en Mount Sinai. “Puedes notar un bulto, hinchazón y un color negro azulado, éste es el resultado de la acumulación de sangre debajo de la piel“, explica.

Por lo general este tipo de lesión es rara, ya que tus partes femeninas están bastante bien protegidas. “Realmente tendrías que estar haciendo algo especial para que esto suceda en la vida cotidiana”, dice Sasan. Algunas instancias  donde es más común que esto ocurra son si realizas ciclismo de montaña intenso, cabalgata o durante el parto. Sin embargo, en su mayor parte, el moretón sanará con un poco de hielo y tiempo“, dice ella.

Leer más: 18 cosas de la vagina que realmente necesitas saber

Pelvis fracturada

datos sobre la vagina

Romper los huesos de tu área pélvica (los que están justo al lado de tu sistema reproductivo) es bastante raro; representan aproximadamente el tres por ciento de todas las fracturas, informa la Academia Estadounidense de Cirujanos Ortopédicos. Pero, oye, esas cosas pasan. De hecho, la Asociación Estadounidense para la Cirugía de Trauma estima que alrededor del ocho al nueve por ciento de los incidentes de traumatismo cerrado (caídas y accidentes automovilísticos o en bicicleta) provocan lesiones en la pelvis.

¿Las buenas noticias? La mayoría de las fracturas pélvicas son leves, y aunque duelen mucho, generalmente no requieren cirugía. De todos modos, si has tenido un accidente o estás preocupada por un dolor, hazte una radiografía para salir de la duda.

Cortes

“La mayoría de las lesiones debajo de la cintura están relacionadas con la depilación”, dice Sasan. Y cualquiera que se haya afeitado o sufrido con la cera sabe que ambas pueden provocar cortes involuntarios. “El principal tema con éstos es que aumentan el riesgo de problemas como vellos encarnados, que pueden inflamarse y doler”, señala la especialista.

Estar sin vellos allá abajo también podría aumentar tus posibilidades de infección. Un estudio francés encontró un vínculo entre las mujeres que se depilaron las zonas femeninas ya fuera con cera o con afeitadora y el Molluscum contagiosum, una infección que causa protuberancias irritadas. ¿Suena familiar? Dale un descanso a tu piel aumentando el tiempo entre visitas al centro de depilación o a tu relación con la hoja de afeitar. “Y para descartar problemas como el herpes genital o las verrugas, consulta con tu médico cada vez que notes una lesión o algo anormal”, agrega la doctora.

Quemaduras

Una depilación brasileña mal hecha es la peor pesadilla de cualquier chica, y por una buena razón. La cera demasiado caliente puede provocar graves irritaciones e incluso quemaduras. Una buena especialista sabrá la temperatura ideal con que aplicar el producto (y usará un termómetro para medirla), pero si sientes que ésta está demasiado caliente, probablemente sea así. La mayoría de los lugares de buena reputación mantienen el producto a una temperatura cálida constante, pero si te quemas, pide una compresa fría, ésta puede aliviar el enrojecimiento y el dolor mientras esperas que se enfríe. Si prefieres hacerlo tú misma, asegúrate de probar qué tan caliente está el betún en tu muñeca antes de aplicarla en el área de tu bikini.

Leer más: Guía completa de la depilación brasileña

Labios rotos

“Si estás demasiado seca allí o has tenido sexo muy duro, podrías tener una rotura en los labios”, dice Sasan. Cómo puedes saberlo? Si sangras, se siente incómodo al orinar o sientes dolor en la zona, eso podría indicar una herida. Si bien esto es raro, a menudo, tu lubricación natural (¡y el lubricante!) es suficiente para evitar este problema. “Además, las lesiones tienden a ser un poco más comunes si estás usando un juguete sexual o si es tu primera vez”, señala la especialista. Si crees que puedes tener un corte, consulta a tu doctor. A menudo, el tratamiento es simplemente dejar que el área sane por sí sola, pero a veces puedes necesitar puntos de sutura.

Vía:Womenshealthmag.com