Las piscinas son un lugar popular para muchas personas, especialmente las mujeres. Ya sea para refrescarse en verano, mantenerse cálidas en invierno o practicar deportes, las piscinas son una opción atractiva. Sin embargo, es importante tener en cuenta un producto que puede tener efectos negativos en la piel y el cabello: el cloro presente en el agua.
¿Cómo afecta el cloro a la piel?
Aunque a veces se subestima su impacto en comparación con el cabello, el cloro puede tener un efecto considerable en la piel, especialmente si se está expuesto de manera prolongada y frecuente. Puede provocar sequedad e irritación en la piel y los ojos, lo que a su vez puede favorecer la aparición de eczema o dermatitis localizadas o más extensas. Las personas con piel sensible, niños y personas de edad avanzada son más susceptibles a estos efectos. Si alguien ya padece una enfermedad de la piel, como eczema, pitiriasis o psoriasis, el cloro puede agravar aún más la situación.
¿Cómo afecta el cloro al cabello?
Los efectos del cloro en el cabello son evidentes y perjudiciales. El cabello tiende a volverse seco y quebradizo, y si se combina con la exposición al sol, estos efectos se intensifican. Si esta condición persiste durante mucho tiempo, el cabello puede desestabilizarse y alterar sus ciclos fisiológicos, lo que podría provocar una caída más acelerada.
Consejos para contrarrestar los efectos del cloro:
Para reducir los efectos del cloro en la piel y el cabello, aquí hay algunos consejos y hábitos que se pueden adoptar:
1. Darse una ducha después de salir de la piscina.
2. Aplicar protector solar inmediatamente después de la ducha.
3. Usar crema hidratante según el tipo de piel después de bañarse en casa.
4. Utilizar un gorro de piscina.
5. Usar champú y acondicionador con propiedades hidratantes para el cabello.
Tratamientos complementarios:
Existen en el mercado sprays protectores invisibles con Mexoryl que brindan protección UV instantánea al cabello durante la exposición solar, aportándole brillo y creando una barrera contra la sequedad.
Además, hay tratamientos disponibles para mantener la piel y el cabello saludables a pesar de la exposición frecuente al cloro. Se recomiendan máscaras nutritivas o hidratantes específicas que se aplican con masajes y se dejan actuar durante 30 minutos bajo vapor. Esto se puede realizar una vez al mes.
También se sugiere tomar vitaminas con biotina 10 mg o Imeeden Management 2 comprimidos al día durante 3 meses para fortalecer la piel y el cabello.
En resumen, es importante tomar precauciones y seguir estos consejos para proteger la piel y el cabello al disfrutar de las piscinas y minimizar los efectos adversos del cloro.
Joanna Wurmann, Editora y Corresponsal en Miami, Mujer y Punto.
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