Mañana, sábado 6 de julio, tendrá lugar el bautizo del más reciente miembro de la familia, Archie Harrison Mountbatten, el primogénito del Príncipe Harry y Meghan Markle. El evento se realizará en una capilla privada dentro del Castillo Windsor.
En esta celebración, los Duques de Sussex han tomado la decisión de restringir el acceso a la prensa, para mantener el momento lo más privado posible. Y si bien seguirán con muchas de las tradiciones que se llevan por años en la familia Real, hay una que han roto y nos ha dejado a los fanáticos con una gran incógnita.
Al ser parte de la familia real, muchas decisiones son informadas al público. Sin embargo, en esta ocasión, Meghan y Harry, aceptaron la petición de mantener en secreto la identidad de quienes serían los padrinos de Archie. En un comunicado del Palacio entregó la información: “Los padrinos, de acuerdo con sus deseos, permanecerán privados”.
Fuera de esto, seguirán en tradición: la bata de bautizo, utilizada en los bebés reales por más de 160 años. El Arzobispo de Catemmbury oficiará la ceremonia, fue quien también bautizó al Príncipe Carlos, los príncipes siguientes e incluso a Meghan Markle. Agua Bendita traída del Río Jordán, la fuente de Lily, una de las joyas de la corona británica, utilizada para estas ceremonias desde 1840 y por supuesto el infaltable retrato familiar serán parte del bautizo.
Este último sería lo más esperado por los fanáticos, pues según la revista Hello! Meghan y Harry compartirán las fotografías días después del evento y no durante la celebración.
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