Durante los años de la menopausia, la caída y el adelgazamiento del cabello casi siempre están relacionados con cambios hormonales. Específicamente, con una reducción de estrógenos y progesterona. Dado que estas hormonas contribuyen a que el pelo crezca más rápido y permanezca en la cabeza por más tiempo, cuando los niveles bajan, este crece más lentamente y se vuelve más delgado. Si bien estas hormonas disminuyen, este proceso puede a su vez desencadenar un aumento de las hormonas andrógenas (un grupo de hormonas masculinas), las que pueden encoger los folículos pilosos y provocar la caída del cabello.
Aunque el adelgazamiento del pelo suele ser el resultado de la fluctuación de las hormonas, puede haber otros factores que contribuyan a la caída del cabello durante la menopausia, como los niveles de estrés, las enfermedades o la falta de nutrientes. Realizarse un análisis de sangre para controlar la función tiroidea o las enfermedades autoinmunes podría ayudar a descartar otras posibles causas de este problema.
Además, no siempre es sencillo saber cuándo comenzamos a perder cabello realmente, debido a que esto ocurre todos los días, independientemente de la edad o la salud, puede ser difícil saber cuándo comienza la pérdida de cabello real. Sin embargo, eventualmente los signos se notan más. Si observas que se te cae más pelo de lo habitual, entonces podría ser el momento de hablar con tu médico. Observa tu cepillo, tu almohada, en el lavabo, en el piso y en la ducha para verificar si hay una caída excesiva de este. Si usas una coleta con regularidad, es posible que notes que la cola de caballo se reduce de tamaño o ves espacios en tu cabeza a través de los cuales puedes ver el cuero cabelludo.
Entonces, ¿qué puedes hacer para prevenir la caída del cabello y mantener una cabellera sana?
¡Bebe agua!
Necesitamos estar bien hidratadas para que TODO en nuestro cuerpo funcione correctamente. Trata de beber la mitad de tu peso corporal en onzas. Por lo tanto, si pesa 150 libras, querrá beber al menos 75 onzas de agua al día.
Consume una dieta bien balanceada y elimina todos los alimentos procesados y azúcares.
Incluye grasas saludables como el aceite de oliva. Además, asegúrate de comer alimentos con alto contenido de ácidos grasos esenciales como nueces, almendras, salmón, lino y semillas de chía. ¡Beber té verde también podría ayudar!
Reduce y controla los niveles de estrés.
Los niveles elevados de estrés y cortisol provocan desequilibrios hormonales. Utiliza ejercicios de respiración, meditación, masajes y ejercicio moderado para reducir los niveles de estrés.
¡Mueve tu cuerpo!
El ejercicio es importante para un cuerpo sano y equilibrado. Este ayuda a reducir los síntomas del aumento de peso, el insomnio y la ansiedad, lo que ayuda a mantener el equilibrio hormonal.
Sé Au-natural.
Esto tal vez sea lo más complejo, pero haz lo mejor que puedas. Limita el uso de herramientas térmicas como el alisador, secador… Etc. Si te tiñes el cabello, intenta usar un color de cabello totalmente natural. Usa productos y suplementos seguros y nutritivos que promuevan el crecimiento saludable del cabello.
Soluciones estéticas rápidas
Si deseas una solución rápida para camuflar el adelgazamiento del cabello mientras buscas las mejores opciones de tratamiento, hay varias cosas que puedes probar. Los estilistas a menudo recomiendan que las mujeres con cabello fino prueben un corte de cabello más corto porque el cabello largo puede hacer que se note más lo fino de los cabellos. Los cortes más cortos como un Bob o un duendecillo son populares, al igual que las capas que agregan volumen y flequillo para agregar textura. Algunas mujeres usan sombreros cuando se sienten especialmente cohibidas.
Terapia de reemplazo hormonal
Debido a que las hormonas influyen en la caída del cabello durante la menopausia, los tratamientos hormonales pueden ser beneficiosos. Las mujeres perimenopáusicas y menopáusicas que se someten a terapia de reemplazo hormonal con gránulos de hormonas bioidénticas pueden notar una mejora en el crecimiento del cabello durante el tratamiento. Sin embargo, la TRH debe usarse para tratar múltiples síntomas de la perimenopausia y la menopausia. No se recomienda utilizar la terapia de reemplazo hormonal para tratar solo la caída del cabello.
Minoxidil
El minoxidil, comúnmente conocido por la marca Rogaine, a menudo se prescribe tanto para hombres como para mujeres con pérdida de cabello. Este medicamento es un vasodilatador que ensancha los vasos sanguíneos para aumentar el flujo sanguíneo al cuero cabelludo y los folículos pilosos. Está disponible sin receta médica o con prescripción médica y viene en forma de aerosol, solución líquida y espuma. El minoxidil debe usarse de forma continua para mantener el crecimiento del cabello.
Antiandrógenos
Los medicamentos antiandrógenos como la espironolactona a veces se recetan tanto para la caída del cabello como para el exceso de cabello en la cara y el cuerpo. Estos medicamentos generalmente se administran junto con un tratamiento tópico como el minoxidil.
Tratamiento de luz roja
Las terapias con luz LED estimulan el crecimiento del cabello al enfocarse en los procesos bioquímicos en el cuero cabelludo. El tratamiento se administra a través de una tapa de luz inalámbrica que se conecta a una aplicación móvil donde puede realizar un seguimiento de los tratamientos.
