Vamos a aclarar una cosa: hay una línea muy delgada entre ser una pareja preocupada y apoyadora y ser alguien con la que él sólo habla cuando tiene problemas.
Tal vez tu hombre sea bueno para hablar sobre sus sentimientos o tal vez tú seas una buena oyente, pero eso no significa que tengas que sentarte, tomar un cuaderno y empezar a anotar tus observaciones.
Aunque él sea bueno para comunicarse, eso no significa necesariamente que se esté comprometiendo contigo.
Algunos hombres son buenos expresando sus sentimientos, ya sea sobre problemas en el trabajo, en la escuela, con su familia, miedos en su carrera…etc. ¿Pero qué hay de expresar sus sentimientos hacia ti? Lo siento, pero si no lo hace, en realidad, ahí hay una falta de compromiso. Créeme.
(Sí, algunos hombres no son así, y si has encontrado a un tipo que se comunica y se compromete, bien por ti. Sólo digo que la mayoría de los tipos no son así).
Es como, ya sabes, un terapeuta. Puedes hablar con ellos y darles consejos sobre sus problemas, pero si quieren profundizar y buscar un nuevo terapeuta por un mejor precio o por un mejor consejo, pueden hacerlo.
No digo que tu pareja no deba comunicarse contigo sobre sus sentimientos. Sólo digo que no deberías sumergirte en el lado oscuro de su mente.
¿Por qué?
Podría desencadenar algo en ti.
Si estás demasiado interesada en cuidar de él y de su salud mental, podrías olvidar invertir en ti y en tu propia salud mental.
Hace unos años tuve una relación muy tóxica con un chico deprimido, suicida y adicto a la cocaína y el alcohol. (Yikes) Quería cuidarlo e intenté todo lo que estaba a mi alcance para hacerlo, pero con eso, me descuide a mí misma. Puse sus necesidades antes que las mías. Estaba tan preocupada por él, tan ansiosa todo el tiempo (incluso más que antes) y me convencí de que si lo amaba tanto como decía tenía que demostrarle lo mucho que me importaba.
No sacrifiques tus necesidades y descuides tu salud mental para cuidarlo.
Ser una compañera y un apoyo es excelente, pero no siempre pueden depender de ti para que seas un hombro para llorar, un oído para hablar o un asesor. Esa es demasiada presión para una persona (que probablemente no sea un psicólogo o terapeuta con licencia).
Siéntate con tu pareja e identifiquen las expectativas y establezcan límites. Tú y tu salud mental también son importantes. No te olvides de eso.
Escrito por Kelly Peacock
Publicado en Thoughtcatalog.com
Traducido por Mujer y Punto.
