Es totalmente común que tengamos fantasías sexuales – tal vez siempre buscamos la misma cosa en la barra de búsqueda de nuestro sitio porno preferido, o nos descubrimos a nosotras mismas soñando despiertas con prácticas sexuales que nunca hemos considerado probar antes. Mientras que en la realidad, no hacemos las cosas que estamos viendo o imaginando.
Lo que pensamos mientras nos masturbamos a menudo no refleja nuestra vida sexual. Y a veces, no está del todo claro por qué un escenario particular nos excita, o de dónde vino la idea. A veces, la idea de poner en práctica un acto sexual en persona con el que fantasiamos podría parecer un poco aterradora o directamente poco atractivo.
Estudios sobre las fantasías sexuales demuestran que la mayoría de la mujeres encuestadas habían fantaseado con tener relaciones sexuales con más de tres personas, sin embargos los estudios encontraron que solo el 8% de las mujeres realmente han tenido un trío. Y según una encuesta de YouGov de 2019, solo el 8% de nosotras decimos que el porno que vemos es similar a nuestra vida sexual real.
¿De dónde provienen las fantasías sexuales?
La mayoría de las personas no saben por qué fantasean con ciertas cosas o tienen perversiones particulares, y está bien si no tienes ningún deseo de llegar al fondo del ‘por qué’. “Algunas pueden provenir de influencias generacionales y familiares donde hemos sido testigos de ciertas relaciones en el pasado, por ejemplo.
Sin embargo, las fantasías también pueden estar vinculadas a veces al trauma como “una forma en que nuestro cerebro resuelve algo o nos consuela”, aseguran los especialistas, lo que significa que podría ser útil que las cumplas con alguien de confianza o un profesional de la salud mental.
Muchas fantasías, como podrías haber adivinado, provienen de ver porno, lo cual es normal, aunque a veces puede llevar a expectativas poco realistas sobre el sexo. Claro que a veces es dificil decir que vino primero: la fantasía o el porno.
¿Qué Propósito Sirven las Fantasías?
Fantasear durante la masturbación o cuando estamos excitadas, incluso con una pareja, es muy común y éstas, además, pueden ayudar con la excitación y el orgasmo. Jugar roles y hablar sucio tienen el poder de llevarnos a mitad de camino hacia nuestros escenarios fantaseados mientras mantenemos nuestra conexión con la realidad. Disiparse en nuestros pensamientos puede ser meditativo y participar en formas adultas de ‘juego’ puede ser increíblemente catártico, si se hace de manera segura. Las fantasías también pueden ayudarnos a distraernos del estrés diario, permitiéndonos volvernos vulnerables en el momento y disfrutar del contacto sexual con menos interrupciones externas.
¿Por Qué Algunas No Exploran Sus Fantasías Sexuales?
Si tienes fantasías que no has explorado, no hay nada que diga que tienes que replicarlas con tu pareja(s). Las fantasías son fantasías por una razón: rara vez coinciden con los eventos de la vida real porque en nuestras propias cabezas controlamos todo, y en la vida real, eso es mucho más difícil de hacer.
Las fantasías también pueden estar acompañadas de vergüenza y tabú, lo que puede disuadir a algunas de explorarlas en la vida real. Pero no hay necesidad de sentir vergüenza acerca de nada sobre lo que estás fantaseando, siempre y cuando sea seguro.
Beneficios de Explorar Fantasías Sexuales
Explorar nuestras fantasías sexuales, cuando lo hacemos de una manera segura y confortable, puede ser una experiencia excitante y placentera, y puede ayudarnos a descubrir nuevas facetas de nuestra sexualidad. Si estás en una relación o explorando con una pareja, hablar y, potencialmente, actuar juntas las fantasías puede ayudar a fortalecer el vínculo. Las fantasías pueden ayudar a las parejas a calmarse cuando están separadas y también a fomentar y fortalecer el vínculo cuando están juntas. Al final del día, hacer que la otra persona se sienta sexualmente satisfecha se siente bien.
Cómo Explorar Tus Fantasías de Manera Segura
Tomarte el Tiempo para Explorar y Hablar
Si decides explorar una de tus fantasías, ya sea con una pareja estable o alguien nuevo, asegúrate de no sorprenderlas con ella de la nada. En lugar de eso, tómate el tiempo para tener una conversación sobre lo que deseas y si tu(s) pareja(s) también desea explorarlo.
Prepararte Adecuadamente y Comenzar Despacio
Si tu fantasía es algo muy diferente a tu vida sexual normal, no te lances al vacío sin más. Investiga sobre cómo funciona, mantente segura y toma las cosas con calma cuando lo intentes.
Prioriza el Consentimiento y el Cuidado Posterior
Es probable que tu fantasía involucre al menos a otra persona, así que asegúrate de tenerlas en cuenta y estar chequeándose mutuamente. Si estás experimentando con un nuevo fetiche, elige una palabra de seguridad sobre la que tú y tu(s) pareja(s) estén de acuerdo por si quieres detener lo que está sucediendo por cualquier motivo, y no temas usarla.
El cuidado posterior y cómo tú y tu(s) pareja(s) se desenlazan de la experiencia de la fantasía también es importante. Regresar a la realidad y desbriefing es tan crucial como la fantasía misma, especialmente si no fue exactamente como se planificó.
Fuente:www.cosmopolitan.com
