You are currently viewing ¿Es necesario cambiar mi tampón cuando voy al baño?

Por Joanna Wurmann

Hablemos de un tema que, aunque común, rara vez es discutido abiertamente: ¿Es necesario cambiar el tampón cada vez que vamos al baño? A todas las mujeres les ha surgido esta duda al menos una vez, y si creías que eras la única buscando respuestas, te aseguro que no estás sola.

Primero, desmitifiquemos la idea de que mantener el tampón puesto mientras se usa el baño es riesgoso. La realidad es que, en la mayoría de los casos, está bien dejarlo, especialmente si acabas de ponértelo y la idea de sacar un tampón seco no es precisamente atractiva. La proximidad de la uretra, la vagina y el ano hace que, en términos de higiene y salud, el riesgo de infección sea similar, ya sea que estés menstruando o no.

Sin embargo, no podemos ignorar completamente los riesgos. La preocupación principal es evitar que los gérmenes, especialmente la bacteria E. coli, común en nuestras heces, pero peligrosa si entra en contacto con la vagina o la uretra, contaminen la cuerda del tampón. Para prevenir infecciones como la vaginosis bacteriana o las infecciones del tracto urinario, es crucial limpiarse de adelante hacia atrás y ser consciente de dónde está la cuerda del tampón durante el acto.

En cuanto a la práctica, antes de cualquier ajuste cerca de la zona íntima, lavarse las manos es un mandamiento. Para mantener la cuerda limpia, un truco es tirar de ella hacia adelante, lejos del ano, o incluso ocultarla entre los labios vaginales. Pero si se presenta cualquier dificultad para mantener la cuerda alejada de las heces, es mejor optar por la seguridad y cambiar el tampón.

Hablemos de cuándo Sí, es esencial retirar el tampón: si ya llevas ocho horas o más con el mismo, ¡es momento de cambiarlo! El riesgo de síndrome de choque tóxico, aunque bajo, aumenta significativamente después de este tiempo.

En situaciones extremas, como una diarrea severa, la recomendación es clara: mejor sacarlo. Además, si por accidente la cuerda se contamina, es necesario cambiar el tampón de inmediato. Y no olvides que, en ocasiones, tu cuerpo toma decisiones por ti; esfuerzos intensos pueden desplazar el tampón, así que siempre es buena idea tener un repuesto a mano.

Este tema, lleno de tabúes, pero esencial para nuestra salud y bienestar, demuestra la importancia de conversar abiertamente sobre nuestras experiencias menstruales. Las dudas son normales, y buscar respuestas es un paso hacia una mayor comprensión y cuidado de nuestro cuerpo. Recuerda, en cuestiones de salud íntima, errar por el lado de la precaución y consultar con un especialista ante cualquier inquietud es siempre la mejor opción.

Joanna Wurmann, Editora y Corresponsal en Miami, Mujer y Punto.
Para más de Miami sígueme en @miamibyjoey